1.
ELABORACION DE PROGRAMAS Y
PROYECTOS
Gloria Pérez Serrano
Una de las características diferenciales de la educación no formal es la
carencia de ajustes propios y formalismos de los sistemas oficiales. Esto hace
posible una mayor flexibilidad para integrar en su funcionamiento aspectos,
elementos, técnicas y medios novedosos. De este modo, el modelo de acción
social admite gran variedad de enfoques y adaptaciones a los diferentes
objetivos que se pretenden conseguir. La elaboración de programas y
proyectos en Animación Sociocultural es un requisito imprescindible para
orientar la praxis en esta materia.
1.1.
DEFINICIÓN DE PLAN, PROGRAMA Y PROYECTO
En el ámbito sociocultural se utilizan a menudo términos susceptibles de
interpretaciones diversas que pueden generar confusión. Por ello conviene
delimitar el significado de los mismos en el ámbito social:
ü Plan: Secuencia ordenada de
operaciones que conducen a un objetivo. Declara lo que se quiere conseguir y fija
una serie de acciones generales, así como las estrategias y los recursos (largo
plazo).
ü Programa: Documento en el que se
explicita el proceso a seguir para lograr objetivos y concretar una línea de
acción (medio plazo). Entre sus rasgos destacan:
q
Carácter anticipatorio.
q
Tiene en cuenta diversos factores que intervienen en la acción
socioeducativa.
q
Implica sucesión sistemática de tareas.
ü Proyecto: Unidad operativa donde se especifica qué se va a hacer, cómo y cuándo,
para conseguir objetivos en un plazo de tiempo establecido (corto plazo). Rasgos
significativos:
q
Concreta elementos para conseguir objetivos.
q
Orienta, guía y prepara el camino.
q
Implica descripción de lo que se quiere conseguir.
En síntesis, el plan presenta un carácter global, diseña objetivos y
metas globales. El programa por su parte es más específico ya que fija
objetivos y metas más concretas. El proyecto es la unidad más concreta y
específica de acción.
1.2.
EL PROYECTO COMO UNIDAD DE
INTERVENCIÓN SOCIOCULTURAL
Los proyectos pueden ser muy diversos y variados, tanto en sus objetivos
como en su metodología; ahora bien, todos ellos tienen algo en común que los
identifica como proyectos. El proyecto es un avance anticipado de las acciones a realizar para
conseguir unos determinados objetivos.
Proyectar racionalmente implica partir de una realidad actual para llegar,
o al menos acercarse, a otra realidad que, por el momento, sólo es
potencialmente posible. La doble perspectiva de lo que se parte
y hacia lo que se tiende está continuamente presente en la elaboración
de un proyecto.
El proyecto sociocultural tiene siempre la
intención de alcanzar aquello que se pretende con la mayor eficacia y calidad.
El proyecto sociocultural implica siempre:
ü Reflexión seria y rigurosa sobre
aquel problema concreto que pretendemos mejorar.
ü Tomar conciencia de las
múltiples necesidades existentes y de las situaciones problemáticas
ü Seleccionar un problema concreto
que presente una solución viable, aunque sea difícil.
ü Elaborar un diseño lo más
completo posible, sistemático y reflexivo, científico.
ü Apertura y flexibilidad en su
aplicación.
ü Originalidad y creatividad en la
elaboración del proyecto intentando responder a necesidades concretas.
ü Partir siempre de la práctica,
desde la óptica de quién vive el problema y de cómo lo vive.
1.3.
ELABORACION DE PROYECTOS DE
ANIMACIÓN SOCIOCULTURAL
La formulación precisa y concreta del proyecto exige conjugar todos los
pasos que lleven a la consecución del mismo, tanto la fase de diagnóstico de necesidades,
identificación de objetivos, especificación de actividades, tiempo de
ejecución, como los recursos que se disponen para llevar a cabo el proyecto.
Tanto en la elaboración de programas como de proyectos en Animación
Sociocultural, existen ciertos
momentos clave:
1. Diagnóstico
Identificación de:
problemas, necesidades y recursos
|
||
2.
Planificación
- Objetivos
- Metodología
(estrategias, actividades)
- Tiempo y recursos
|
||
3.
Aplicación
- Desarrollo,
seguimiento y control
|
||
4.
Evaluación
- Diagnóstico,
proceso, final
|
||
5.
Revisión
- Informe final
|
Seguidamente, describimos cada una de las fases del proceso de elaboración
del proyecto sociocultural contempladas en las figura precedente.
ü La fase de diagnóstico es previa a
la formulación del problema. Partimos de la base de
que cualquier realidad es susceptible de mejora, por ello deberá someterse a
diagnóstico. Esta
fase implica el reconocimiento, lo más completo posible de la situación objeto
de estudio. Conviene examinar la realidad, las personas, el entorno, las
características y las circunstancias que van a incidir en el proceso y en el
desarrollo del proyecto. El diagnóstico también se denomina análisis de la
realidad. Consiste en descubrir el problema y llegar a comprenderlo para
buscarle una solución. En todo diagnóstico hay que contemplar:
q Las necesidades existentes.
q Establecer prioridades.
q Las causas que han originado el problema y que
mantienen la situación carencial.
q Formulación y delimitación del problema.
q El problema tal y como es percibido el
interpretado por los sujetos.
q La situación social y el contexto en el que se
inscribe.
q Estudiar lo que dice la literatura sobre el
tema.
q Prever la población a quién va dirigido
proyecto.
q Prever los recursos.
q La ubicación del proyecto.
ü Una vez que hemos tomado
conciencia del diagnóstico, estamos en condiciones de ejecutar la
planificación. Planificar es trazar los planos para la ejecución de una
obra, hacer un plan o proyecto de una acción. La
planificación consiste en buscar, anticiparse, prever, predecir e intentar
vislumbrar lo que va a desarrollarse y aplicarse en el futuro. Los principales aspectos a
contemplar en la fase de planificación son:
q
Objetivos, tanto generales como específicos.
q
Características del grupo o grupos con los que se va a trabajar.
q
Metodología: tanto en lo que se refiere a las estrategias, tareas y
actividades.
q
Temporalización o calendario para llegar a cabo el proyecto.
q
Recursos humanos, materiales y financieros.
ü La fase de
aplicación-ejecución implica que, una vez previstas las tareas y actividades a realizar,
estamos en condiciones de ponerlas en práctica. Conlleva poner en práctica
el proyecto y prestar atención a su
desarrollo, seguimiento y control. El proceso de ejecución y gestión ha
de mantener la coherencia lógica marcada desde la formulación de objetivos.
Los sistemas de control del proyecto constituyen elementos de equilibrio entre
la flexibilidad de las acciones y la improvisación a la hora de ponerlas en
marcha..
ü La evaluación consiste en ir revisando lo que
se está haciendo en la práctica. La evaluación para la mejora no es una etapa
final, pues debe estar presente desde el inicio hasta el final del proyecto,
para ir controlando el logro de los resultados. Evaluar significa examinar el
grado de adecuación entre un conjunto de informaciones y un conjunto de
criterios adecuados al objetivo fijado. La evaluación final
hace referencia a la elaboración de una síntesis con todos los elementos
proporcionados por la evaluación inicial y procesual, para llegar a una formulación
global en la que se ponga de relieve si se han alcanzado los objetivos y en que
medida.
ü El informe final tiene como propósito dar a conocer los
resultados obtenidos a otras personas para que puedan contrastarlos. Este informe pondrá de relieve los resultados
que se han obtenido, una interpretación reflexiva y crítica de los mismos, las
conclusiones que se puedan derivar del estudio así con las posibles
aplicaciones prácticas y las recomendaciones que se consideren convenientes para
el futuro.
Gracias por la información, me ayudo mucho, buen trabajo
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